Casa de la familia Prado Valle, con más 75 años de construida (Foto: Isaí Jara) |
Mata de Plátano es uno de los seis distritos originales del cantón de Goicoechea.
No obstante, el distrito pasó a llamarse El Carmen entre los años 1952 y 1974: hoy día gran cantidad de personas conocen el área por El Carmen de Guadalupe, en lugar del nombre original Mata de Plátano de Goicoechea.
Si bien se han dado cambios toponímicos, durante su historia no se han presentado cambios en las fronteras y el distrito ha preservado su extensión territorial desde el año de 1891.
Limita con el distrito Purral al norte, Ipís al noroeste, Guadalupe al oeste y Rancho Redondo al noreste, así como con el cantón de Montes de Oca al sur.
El distrito mantiene una fuerte producción agrícola en sus partes altas principalmente, como es el caso del café, aunque se está desarrollando una gran actividad urbanística. Gracias a esto se puede identificar el impulso para la generación de servicios privados y locales comerciales típicos de zonas residenciales, concentrándose en la parte oeste del distrito, que es donde se da una mayor concentración de urbanizaciones, por otro lado en la parte este aún dominan las actividades agropecuarias, con grandes zonas verdes con uso agrícola y ganadero, principalmente los servicios, talleres, clínica dental, abastecedores, pulperías, lecherías y ventas de árboles de navidad.
El estudio también encontró que el distrito de Mata de Plátano, experimentaba en ese entonces concentraciones de hasta 9 proyectos muy cercanos entre sí.
Entre esos 9 proyectos uno de ellos era “La Pradera”, propiedad de la familia Prado Valle, ubicada 300 metros este de la Escuela José Cubero en El Carmen de Mata de Plátano, Goicoechea, con 40 años de producir árboles navideños de la especie de Ciprés (Cupressus lusitanica).
Finca “La Pradera”, hoy día la administra José Francisco Prado Valle, hijo de don José Nicolás Prado Cubero y María Elena Valle Soto (Q.E.P.D), un contador privado, que se dedicó a la producción de este tipo de árboles y que expresa a www.lavozdegoicoechea.info, que no le pesa haber dejado la contaduría por esta actividad, ya que a sus 57 años, se siente identificado con la naturaleza y aprendió a domar estos arbolitos que cada diciembre llevan alegría a miles de familias, no solo del cantón sino del país en general.
Historia de los árboles de navidad
El cultivo de árboles de Navidad es una actividad agrícola, silvícola y hortícola que implica cultivar cipreses o pinos, principalmente, para utilizarlos en específico como árboles de Navidad.
En el mundo se acostumbra el uso de árboles naturales como parte de los adornos de los hogares para festejar la temporada navideña.
Está costumbre tuvo su origen en el Oeste de Alemania, cerca del año de 1500 D. C., generalizándose su uso en Europa. Posteriormente en el año 1804, fue adoptada en Norteamérica y años más tarde la tradición se popularizó en los Estados Unidos
El primer vivero de árboles de Navidad apareció en 1901, aunque la mayor parte de los consumidores continuaron obteniendo sus árboles directamente de bosques hasta los años 1930 y 1940. El cultivo de árboles de Navidad fue visto en principio únicamente como una alternativa viable para darle uso a tierras de labranza de baja calidad. Sin embargo, esa percepción ha cambiado dentro de la industria agrícola.
El cultivo de árboles de navidad practicado en Costa Rica es único en su estilo en América Tropical, esto porque se ha basado en el uso exclusivo del ciprés (Cupressus lusitanica) en una relación de oferta y demanda positiva y nada despreciable para el productor.
La experiencia del productor, la existencia de un paquete tecnológico y una tradición por parte del usuario son oportunidades que favorecen a esta práctica en nuestro país.
El ciprés ha logrado compenetrarse a los hogares costarricenses como una tradición navideña desde hace varias décadas dada la forma, color y aroma de su follaje que lo hacen particular entre otras especies forestales.
Para que un árbol sea considerado de calidad, se debe guardar una proporción entre su base y la altura para lograr una forma cónica y además debe haber calidad en la poda, el follaje debe ser verde, aunque existe una amplia gama de tonalidades, aun tratándose de la misma especie.
Un ciprés de calidad debe tener una densidad del follaje de entre 90 y 100 por ciento, es decir, no debe haber huecos en ninguna cara del árbol, mientras que el olor, que es una característica relevante para las personas que los adquieren, depende mucho de la especie.
Además, de la producción y ventas de árboles navideños, “La Pradera”, también ofrece los fines de semana venta de deliciosas comidas nacionales en la soda que se encuentra dentro de la finca.
Esta es una bonita oportunidad para que visiten esta bella comunidad de Mata de Plátano y con ello adquieran su árbol de navidad que adornará su casa estas fiestas navideñas.
La temporada de venta de árboles para este año 2019 ya está abierta y como es costumbre cuenta con una variedad de tamaños y precios.
El horario de atención al público es de lunes a domingo de 8:00 am a las 5:00 pm, jornada continua * 24/7 *. Teléfonos: 8879- 6517 y 2245-5984
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