Por Gerardo A. Pérez Obando (Gapo)
LA VOZ DE GOICOECHEA.- 1950…El aire salpicado de amistad y alegrÃa con aroma del diciembre cipresal se colaba en los rincones del viejo hospital San Juan de Dios inundando de júbilo el nosocomio. Los médicos habÃan levantado una lista de posibles nacimientos para navidad. Carlos Romeo estaba inventariado para el 25…
Cuatro dÃas antes, su madre comÃa un antojo sin saber que minutos después le provocarÃa un ataque de vómitos imparables estimulando un nacimiento anticipado. Ese 21 los ojos de doña Xinia se anexaron con la iluminación navideña arrullando cuidadosamente al recién nacido.
Durante su infancia anheló ser agrónomo y hacia ahà encaminaba pensamientos y esfuerzos. En 1964 ingresó al Liceo de Costa Rica con el privilegio de tener como profesora a doña Flora de Amighetti quien le estimuló a dibujar, pintar y hacer figuras de barro en el patio. Ella afinó sus manos para la creación de las primeras obras y dibujos geométricos psicodélicos con formas abstractas de la época. Producto de esa sensibilización inició viajes los fines de semana a la Cruz de Alajuelita, cerros Las Tres MarÃas y Puntarenas desarrollando más el sentido de amor hacia la naturaleza.
La Universidad de Costa Rica en esa época asignaba dÃa y hora especÃfica para matricular. En AgronomÃa recibió las tarjetas perforadas e inició el proceso. Antes de terminar, sin motivo, las devolvió y en silencio enrumbó a la escuela de medicina.
El servicio social lo ejerció en Puntarenas. Una vez finalizado, regresa al hospital Calderón Guardia e inicia la especialidad en cirugÃa general. Justo terminando la jefatura le llama para ofrecerle una beca en la subespecialidad en cáncer gástrico en Japón, la rechaza porque le atraÃa más la cirugÃa vascular, sueño que alcanzó con el programa de Harvard Medicine School.
Debidamente incorporado, del Calderón Guardia pasó a la clÃnica Jiménez Núñez en Guadalupe de Goicoechea. Luego al hospital William Allen en Turrialba para abrir el servicio de cirugÃa vascular en la región. Se enamoró del pueblo y su gente donde construyó consultorio y casa en una parcela donde cosecha árboles frutales.
En Turrialba la vena artÃstica lo llama a matricular Bellas Artes en la UACA. Pese al sacrificio de viajes entre semana, culmina la especialidad en pintura al óleo pero no se queda ahÃ, retoma y continúa trabajos en escultura de gran formato en piedras de mármol y granito; madera y modelado en arcilla. Paralelamente realiza estudios de fotografÃa general y documental en la ULACIT y Universidad Veritas.
Su espÃritu artÃstico y determinación le exige reinventarse debido a que una operación en la columna le impide continuar con escultura en gran formato.
Se matricula en la Escuela Studio Mettalo decidido a recibir clases de orfebrerÃa. En el 2010 obtiene el tÃtulo de Técnico Orfebre Contemporáneo donde cosecha premios de platerÃa por los mejores proyectos en joyerÃa contemporánea.
1974 fue el inicio de la etapa para concretizar sueños. Su matrimonio fue con una bella dama guadalupana que los llevó a establecerse en Goicoechea. Vivieron unos años en la urbanización Saint Clare en El Alto, en Guadalupe Centro y ahora divide su tiempo entre Calle Blancos y Turrialba.
La primera oficina estuvo en Guadalupe centro, del antiguo Gallito o actual Walmart 100 metros este, entrada a Barrio Esquivel Bonilla. Rememora el inmenso Taller Franklin que quedaba en los alrededores especializado en motos Harley Davidson. La especial atención de don Franklin Vargas Arias el gentil propietario que le permitÃa visitar las decenas de vitrolas que custodiaba en el fondo del plantel.
En una casona cerca del cementerio de Guadalupe vivÃan unos comerciantes heredianos conocidos como los Coto, un anexo a la entrada servÃa de taller para reparar motores eléctricos. Por la época y estilo de construcción del inmueble se convirtió en tema obligado para los estudiantes de Bellas Artes de la Universidad de Costa Rica. Hoy en el Patrimonio de Goicoechea debidamente conservado.
Después de adquirirla se convirtió en el castillo del boomer soñador tirando el ancla para su consultorio final por si desea conocerlo.
Recuerda las exposiciones con cariño, aunque sobresalen por emotividad las del Museo Municipal de Cartago y GalerÃa Sophia Wanamaker auspiciado por la Embajada de Estados Unidos en el Centro Cultural Costarricense Norteamerican
Por rutilantes tiene dos encadenadas: En el 2015 preparó la foto edición en un libro alegórico con el cual inauguró la Expo Esferas de piedra del DiquÃs en el Museo Nacional con cobertura de prensa escrita y televisiva nacional. A los dÃas le llaman para exponer en el evento “Le notti d’Italia”, “las noches de Italia” en un renombrado hotel en Costa Rica. Fue una semana de actualidades italianas con pasarelas, modas, ropa, zapatos, joyerÃa. La culminación fue un espectáculo sin igual en organización, derroche y lujo con estilo europeo.
En el párrafo final veremos parte del recorrido artÃstico del polifacético aspirante de agrónomo, pintor, escultor, fotógrafo, documentalista, orfebre, fruticultor, médico, pero sobre todo, excelente amigo, ejemplo de superación.
Exposiciones de pintura: 15 años del Imas, 50 aniversarios del Invu, bibliotecas y sistema bancario. OrfebrerÃa: Ganador de premios en diferentes años. Jurado de graduación en Studio Metallo. Exposiciones en Embajada de México, Estación de Trenes del Atlántico, Museo de Arte Costarricense, Museo de Cristal o del Cuño, Patrimonio Cultural Omar Dengo, Casa del Artista, GalerÃa Metallo, Museo del Jade. Internacionalmente: La Pole Bijoux Baccarat, Paris Francia. Reconocido ganador de la Presea de Oro de la República de México.
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