“MERCOSUR, la única opción de sur América”.
MERCOSUR es el único acuerdo que dispone de una estructura jurídica capaz de conducir y llevar a cabo un proceso de integración plena. Un mercado Común, garantizando la libre circulación de bienes, servicios y personas en todos los aspectos, pero además ostentando instituciones supra nacionales que limiten el poder de los gobiernos, que en especial en nuestra región, se apropian del Estado.
América Latina es una de las regiones más desiguales del mundo, esto está relacionado con sus jóvenes 200 años de historia independentista, que ha concebido un niño en su vientre y no ha podido parirlo aún. La segunda Independencia siempre fue abortada, clandestinamente, América Latina todavía es un niño por nacer.
Es una sociedad creada por un pequeño grupo de élites coloniales para explotar a la gran mayoría de la sociedad y nuestros recursos.
Con democracias débiles y libertades frágiles. Alternando entre Estados fuertes, pesados, débiles y cómplices, alternativamente, con la peligrosidad que ambos encarnan y generando en ambos casos malas consecuencias para la región.
La diferencia con los países desarrollados está en la formación y la consolidación de las instituciones. Esta ha determinado la senda del desarrollo de cada sociedad.
"El estado es un actor irreemplazable a la hora de equilibrar las fuerzas del mercado, en la resolución de conflictos, en proporcionar servicios esenciales y en especial en la función de ayudar a re encausar a los excluidos. Pero debemos mantener al estado y sus élites bajo control, y eso es parte del desafío. Sino la vida bajo el yugo del Estado también puede ser desgraciada y tenemos al respecto también un importante número de ejemplos.
Para entrarnos en el camino virtuoso hay que luchar contra ese legado histórico, que no permite construir igualdad, ni justicia, ni libertad.
Independizarnos de España fue un paso importante, pero no cambió mucho las cosas, incluso las empeoró, cuando fueron las élites locales las que se convirtieron en los nuevos amos explotadores, aliados con la potencia industrial, priorizando intereses mezquinos.
Simón Bolívar decía por aquellos días “hemos estado arando en el mar y sembrando en el viento, lo hemos perdido todo solo nos ha quedado la independencia”.
Se han creado nuevos actores, pero el sistema político ha seguido siendo ampliamente extractivo y corrupto. Esa alianza local / extrajera ha trabajado con toda su energía para garantizar el aprovisionamiento de materias primas y aún más importante oponerse sistemáticamente a todo esbozo de proyecto industrialista que pudiera intentarse en la región.
Para que haya libertad se necesita tanto del Estado como de la Sociedad. Ambos son esenciales, e indispensables, pero uno sin el otro se prostituye. Todavía ninguna sociedad de América Latina ha logrado ese equilibrio, y todo parece indicar que no será a través de las naciones ni los nacionalismos que podremos lograrlo. 200 años de historia nos muestran que ha habido todo tipo de intentos y ninguno, ni los armados y violentos, ni los épicos y pacíficos han podido lograrlo. Solo nos falta probar con la Patria Grande, La Segunda Independencia, la de Martí, la de Rodó, la de Ugarte. Esa es la Integración Latinoamericana. La de la Unión Europea, bendita con sus defectos, la Unión Europea, un espejo donde debe mirarse Suramérica, porque inclusive puede hacerlo hasta mejor por nuestras igualdades, culturales, idiomáticas y sus luchas comunes. Bendito MERCOSUR en el año de su cumpleaños número 30. La Única Opción de Suramérica. Luego de consolidado debemos ir hacia un MERCOSUR ampliado a toda Latinoamérica
La democracia solo puede sobrevivir si la sociedad la protege, pero también le exige, o sea se compromete a estar ahí participativa, vigilante, conducente.
Podemos deducir que no existe una dependencia directa entre el libre mercado y la democracia, pero la economía de mercado es la única que puede traer prosperidad, siempre y cuando El Estado sea verdaderamente democrático. Ahora en igual sentido Las Democracias necesitan mercados inclusivos, socialmente responsables, profundamente éticos.
Para poder lograr estos desafíos solo nos queda evolucionar del
nacionalismo hacia el continentalismo. Una Federación de Naciones,
Un MERCOSUR actual, dinámico, supranacional, integrado de verdad.
Fuertemente aliado a la Unión Europea, primero políticamente,
incluso antes que lo comercial. Necesitamos estar unidos para poder
reclamar un mundo multilateral, transparente, que será sin dudas
mucho mejor que el mundo bipolar, que se avecina. Los Estados Nación
Dominantes deben comprender que hay un despertar hacia un mundo
distinto, multilateral, cooperativo, transparente, en armonía con el
medio ambiente y próspero para todos, espiritual a cambio de
religioso para terminará de enterrar los fanatismos.
MERCOSUR y UE en nosotros está el camino. - MERCOSUR La Única opción de Suramérica.
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