Por Alberto Cabezas
LA VOZ DE GOICOECHEA.- La entrevista periodística es uno de los géneros más interesantes y complejos, exige del periodista o entrevistador una preparación para abordar los temas con inteligencia, análisis y profundidad, para así obtener la información requerida, comprenderla y transmitirla a la audiencia de la manera más atractiva.
Es necesario, antes del encuentro con el entrevistado investigar y documentarse sobre el tema que se va a tratar en la conversación e incluso, sobre el mismo entrevistado o si participan otras personas, con el fin de elaborar preguntas interesantes, que revelen nuevos detalles sobre el asunto, la vida o personalidad del entrevistado.
Según William Salazar Pilozo, periodista no vidente, presidente de la Oficina Pastoral Evangélica del Ecuador, son muchas cosas, cuando alguien están siendo entrevistado, por ejemplo, yo no puedo estar haciendo varias cosas al mismo tiempo, como estar acompañado de asesores para ver que mensajes me llegaron e interrumpir una entrevista para contestar lo que me enviaron al celular. Eso es incorrecto o me concentro a hacer lo que estoy haciendo a lo que me han llamado o que me han pedido “entrevistarme a mí”, eso es lo que tengo que hacer, yo no tengo que estar distrayendo por ejemplo “que estoy con mi asesor”. Eso es imposible y antiético.
Porque no está siendo coherente con la situación que ha aceptado la entrevista. Cuando una persona acepta la entrevista, acepta las condiciones, no es una cuestión impositiva sino una condición de beneficio mutuo. El periodista recaba la información, el entrevistado da la opinión, la respuesta que necesita dar el público a la que el periodista pertenece. Él es el canal, el vínculo, es la puerta abierta para con sus lectores.
Entonces, allí encontramos nosotros esa particularidad con el trabajo que tiene un periodista en sus funciones específicas. Cuando un funcionario no está concentrado, da órdenes, o quiere dirigir una entrevista no está entendiendo el trabajo que hace el periodista, que es informar, porque eso es lo que nos corresponde.
“A veces el entrevistado molesta al periodista, empieza a obviar a desviar o sencillamente cambia la respuesta conforme a la pregunta, no responde a esas inquietudes que tiene esa persona, sencillamente las respuestas son diferentes y entonces trae inconformidad para el periodista y de pronto para el entrevistado, porque no les gustan las preguntas que le hacen”, aseguró el comunicador.
Agregó, “nosotros sabemos que dentro de la labor del periodismo en cualquier parte de las latitudes del mundo, el periodista pregunta y dirige la entrevista, lo que quiere saber, lo que necesita dar a conocer a su medio de comunicación, porque a través de ese medio de comunicación que está hablándole a su público. Entonces, es el público el que necesita saber que está pasando con x situación”.
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| William Salazar Pilozo, periodista no vidente, presidente de la Oficina Pastoral Evangélica del Ecuador |
Ejemplo de una entrevista no realizada
El 17 de junio este medio de comunicación iba a entrevistar a la vicealcaldesa municipal, Irene Campos Jiménez, la entrevista estaba programada a las 10 am. La misma era para dialogar sobre la gestión municipal de la vicealcaldesa tal como se acordó días previos a la entrevista.
En el inicio de la misma la vicealcaldesa dice, “me voy a hacer acompañar por mi asesor para cualquier consulta o duda que yo tenga”. Ante esto, como periodista repliqué, “me gustaría que me explicara ¿Quién es su asesor? Por lo que responde la alcaldesa, “él mismo le va a comentar”. El asesor se identifica, “mi nombre es Manuel Pizarro, yo trabajo con Irene Campos, vice alcaldesa, cualquier cosa que ella tenga, alguna duda o algo que ella crea que no se pueda contestar o si es una situación no regular lo vamos a ver aquí inmediatamente”.
Le respondí, “me gustaría conocer un poco más el puesto del asesor y de sus estudios para que pueda entender un poco más el contexto y ambiente de la entrevista”. Pizarro respondió, “la entrevista es con doña Irene o es un tema mío? Le contesté, “un periodista es quien dirige la entrevista, ahorita doña Irene me está comentado de esta situación”.
Pizarro replica, “yo voy a estar con ella, simplemente como asistiendo, si ella necesita hacer una consulta, yo no voy a participar de la entrevista, no voy a ser parte de la entrevista, simplemente voy a estar aquí por si algo de las preguntas está fuera de contexto o ella necesita algún documento adicional, yo voy a estar presente”. El periodista reitera la solicitud, “si quisiera para poder continuar con la entrevista saber el grado académico de la persona con que se está acompañando”.
La vice alcaldesa, “responde no voy a contestar, porque la entrevistada soy yo y no él”. El periodista responde, “entonces no se va poder hacer la entrevista, ya que un periodista dirige una entrevista y yo la voy a entrevistar a usted”. La vice alcaldesa responde, “entonces envíeme las preguntas por escrito y yo se las contesto”.
El periodista responde, “la entrevista la dirige un periodista cualquier periodista del mundo lo sabe, usted me está diciendo que se va a hacer acompañar de otra persona, yo lo único que quiero conocer - ¿no sé por qué no me lo quiere dar la información? - es ¿qué grado académico tiene la persona que le va ayudar en la entrevista?, por ejemplo, si es periodista, si es abogado, ósea ¿Qué grado académico tiene esa persona con que usted se está acompañando para hacer esta entrevista?”. La vice alcaldesa responde, “entonces hágale la entrevista a mi asesor”.
El periodista de La Voz de Goicoechea, responde, “es que usted me está poniendo reglas, de que se va a hacer acompañar por un asesor en la entrevista, yo lo que quiero conocer es el grado académico de la persona con que se va hacer acompañar usted”. La vice alcaldesa responde, “voy a hablar con su jefe su caso, porque yo honradamente estoy diciéndole que me estoy haciendo acompañar de mi asesor. Yo no solamente estoy dedicada a la entrevista yo estoy firmando, él me está pasando cosas. Entonces voy a continuar con mi trabajo”.
Al final, Alberto Cabezas, periodista de “La Voz de Goicoechea”, no realizó la entrevista a la vice alcaldesa municipal, apegado a las reglas básicas del periodismo y en cumplimiento de lo que expresa el manual de estilo del periódico “La Voz de Goicoechea”, que en lo que interesa dice, “...el tratamiento en una entrevista a una persona siempre será el del periodista”.
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