Historia: La Caja de Pandora

Cuenta la leyenda que Pandora fue la primera mujer que los dioses griegos crearon. Fue concebida con la belleza de Afrodita, la elocuencia de Hermes y la sabiduría de Atenea. De Apolo tomaron los dones en la música porque lamentablemente, la misión de Pandora era aquejar a la humanidad, llevando al mundo mortal las desgracias y males que en ese entonces no existían

LA VOZ DE GOICOECHEA (Por Gerardo A. Pérez Obando (GAPO), columnista ).- El titán Prometeo, quien había entablado buenas relaciones con los humanos, notando que en el mundo había carencias de las que en el Olimpo disfrutaban, decidió robar el fuego divino y entregarlo a la/os mortales para que lo aprovecharan. Esto provocó molestia e ira en Zeus, el dios de dioses.

Zeus, indispuesto por la osadía de Prometeo, entregó como regalo del Olimpo a su hermano Epimeteo, a una atractiva compañera.

Pandora portaba entre sus manos un regalo de Zeus en el momento en que la presentaron ante Epimeteo. Era un envoltorio cerrado que les daría felicidad y prosperidad con la condición de que nunca deberían abrirlo.

El titán Prometeo, conociendo la astucia y traiciones que reinaban en el Olimpo entre la/os diosa/es, hizo que su hermano Epimeteo le prometiera de nunca aceptar regalo alguno proveniente de las divinidades.

Epimeteo, sin embargo, al quedar deslumbrado con la gracia, belleza y dones de Pandora, olvidó del juramento a su hermano aceptándola como compañera, además del envoltorio que custodiaba, el cual escondió en lugar seguro.

El envoltorio contenía un misterioso “phitos”, una tinaja ovalada que actualmente se traduce como caja.

En la mitología griega la caja de Pandora es mencionada como un curioso regalo de los dioses.

Zeus, en secreto había otorgado a Pandora, además de los dones recibidos, una gran dosis de fisgoneo para asegurarse de que en algún momento la tentación de abrir la caja la venciera.

Una noche, la curiosidad dotada por Zeus envolvió la mente de Pandora, y mientras Epimeteo dormía, buscó la llave del lugar que de previo había descubierto e inspeccionado, sin imaginar que ella en algún momento estaba destinada a hacer sufrir a los humanos trayendo al mundo las desgracias y males que en ese entonces no existían: enfermedades, guerras, sufrimiento, hambre, envidia, ira.

Al encontrar la caja, la curiosidad de Pandora le demandó abrirla para espiar su contenido. Al levantar la tapa, grande fue su desilusión al encontrarla vacía. Sucedió que las desgracias y males estaban esperando el instante para esparcirse por el mundo de la/os mortales.

Pandora, entendiendo la malicia de Zeus, inmediatamente volvió a tapar la caja, pero ya la maldad se había expandido. Sin embargo, vislumbró en el fondo algo que no se había escabullido y apresurada, volvió a cerrar la tinaja.

Elpis, el espíritu de la Esperanza había sido el único bien que los dioses habían metido en la caja y la única que no tuvo tiempo, o no quiso a escapar, conservándose en el fondo.

De ese modo fue sellado el destino de la humanidad, porque a partir de entonces se comenzó a padecer toda suerte de males y calamidades, aunque incluso en medio de los más terribles padecimientos, se siguió conservando la Esperanza.

La caja de Pandora es un mítico recipiente de la mitología griega, tomado de la historia de la primera mujer creada por Hefesto por orden de Zeus, que contenía todos los males del mundo mortal.

De esta historia surgió la expresión: “La esperanza es lo último que se pierde”.

- Goicoechea es el cantón número 8 de la provincia de San José, fundado en 1891. Hoy conformado por siete distritos: Guadalupe, San Francisco, Calle Blancos, Mata de Plátano, Ipís, Rancho Redondo y Purral. Donde orgullosamente decimos: "De la montaña a la ciudad, así se extiende mi cantón". "Goicoechea, Goicoechea, te llevo en el corazón." -

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