Equipo vacunatorio se subió a panga para llegar hasta seis pacientes y aplicar primera dosis contra covid-19
Por Henry Alberto Segura Fonseca
LA VOZ DE GOICOECHEA.- La alegría, decisión, y satisfacción por recibir la vacuna contra la covid-19 se apoderó de dos grupos de personas en la zona de Siquirres. Uno de ellos fue el de seis funcionarios de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) que llevaron la protección al otro grupo formado por seis adultos mayores encamados de ese poblado.
Para el personal de salud del CAIS de Siquirres el trabajo inició con los primeros rayos del sol este miércoles 24 de febrero. Ahí un especialista en geriatría, una enfermera, un técnico de redes y tres Asistentes técnicos de atención primaria en salud (ATAPS) organizaron lo que sería un día de grandes experiencias y vivencias.
Los funcionarios tenían que prepararse muy bien porque les esperaba una jordana extensa, de mucho esfuerzo y logística para cumplir con el objetivo de vacunar a doña Odilie Cisneros Visneros, de 94 años, Remigia Sánchez Castillo, de 89, Blanca Villegas Córdoba, de 85, Juan Corea Guadamuz, de 78, Virginia Cambronero Cambronero, de 72 y Franklin Guillén Salazar de 68 años; todos pacientes encamados o por vivir en lugares de muy difícil acceso.
Los trabajadores de la CCSS debieron caminar una hora de donde los dejaba el vehículo institucional, también tuvieron que subirse a una panga y navegar sobre el río Parismina que separa geográficamente los cantones de Guácimo y Siquirres.
Desde la salida del CAIS las anécdotas, cuidados y aventuras, que experimentaban los funcionarios, hacían prever que el día sería estupendo y que al finalizar la jornada la Seguridad Social se impondría una vez más en las comunidades costarricenses.
Antes de las 10:00 de la mañana el personal médico y administrativo ya había pasado la experiencia de ir rio abajo para llegar donde la primera paciente que recibiría la vacuna contra covid-19. En una casa humilde, pero ventilada y rodeada de naturaleza, aguardaba doña Odilie Cisneros para de una vez por todas estirar su brazo e iniciar su proceso de inmunización contra el SARS-CoV-2.
“Fue un día maravilloso, lleno de retos y vivencias que se quedarán con uno para siempre. Uno de los compañeros atap hacía de baquiano, los otros lo seguíamos porque teníamos la certeza de que con él no habría pérdida. Una vez que estábamos en los hogares de los pacientes, sentimos que todo esfuerzo valía la pena” dijo la Coordinadora de Enfermería del Primer nivel de atención del área de Salud de Siquirres, doctora Mildred Garza Jiménez.
El equipo que subió a la panga lo conformaron los ataps Jhonny Herrera Romero, Jonathan Aparicio González, Andrés Salas Miranda, el técnico de Redes Anthony Ramírez Gordon, el geriatra Gustavo Acuña y la enfermera Mildred Garza Jiménez además del chofer Melvin Gómez quien cuidaba del vehículo institucional donde sea que este estuviera.
La doctora Tania Ching Chang, directora médica del CAIS de Siquirres, expresó que hay mucho compromiso por parte de los servidores y que su quehacer va más allá de sus competencias porque subirse a una panga es un acto de amor al paciente.
“Estamos satisfechos porque seis pacientes con enfermedades crónicas y que están dentro del grupo de los segundos a vacunar ya recibieron la primera dosis. Hoy la Seguridad Social brilla, resplandece y demuestra de qué está hecha; está compuesta de rostros humanos que se entregan sin peros al trabajo que día a día se gesta en las unidades y niveles de atención de la Caja Costarricense de Seguro Social” dijo la doctora Ching.
La participación del especialista en geriatría, doctor Gustavo Acuña, tuvo vital importancia ya que él pudo valorar a los pacientes y observarlos por periodos de hasta 15 minutos para ver si alguno de los adultos mayores presentaba alguna reacción.
El CAIS de Siquirres tiene identificadas 7 750 personas mayores de 58 años que son las que están en el segundo grupo de inmunización contra covid-19.
Otras áreas de salud que también están haciendo visita domiciliar para vacunar personas encamadas mayores de 58 años son las de Pérez Zeledón y Tibás, Uruca y Merced.
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